Empieza la segunda evaluación, durante la primera hemos aprendido a realizar los cálculos matemáticos necesarios para la correcta fabricación de distintos instrumentos y ahora los alumnos harán un proyecto en el que tengan que demostrar que han adquirido esos conocimientos para aplicarlos a su construcción.
Para la construcción de los instrumentos vamos a hacer uso de la tabla de frecuencias de las distintas notas musicales:
Lo que queremos es algo que vibre, con una
frecuencia (nota) bien definida y que transmita esa vibración al
aire. Hay varias maneras de hacer esto:
- Hacer vibrar una cuerda, que es lo que hacen todos los cordófonos, o instrumentos de cuerda. En la orquesta de cámara se usan violines, violas, violoncelos y contrabajos, y se pueden sumar una guitarra o un piano. Todos estos son ejemplos de cordófonos.
- Hacer vibrar una columna de aire, como los instrumentos de viento, desde la flauta a la trompeta. En la orquesta se usan trompetas, corno inglés o francés, oboes, clarinetes y fagot, trombones y dependiendo de la música a tocar, saxofones o tuba.
- Hacer vibrar un cuerpo sólido, como las barras del xilofón o el cuerpo de una campana.
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